el paro, la explotación laboral,
la ausencia de un proyecto de nación,
la incapacidad de muchos de los que nos gobiernan,
la corrupción,
la ausencia de una oposición fuerte tan necesaria ahora,
el apoltronamiento de una parte de la sociedad.
Pero aún así no podemos permitirnos perder el ánimo, la ilusión, la iniciativa, el entusiasmo, porque entonces, lo habremos perdido todo.
Necesitamos, ahora más que nunca, abrir mucho los ojos, conocer de cerca los problemas, interesarnos en cada asunto y tomar partido, reivindicar la mejora desde una autonomía de pensamiento. Solo así podremos recuperar la confianza perdida.
Son los mediocres, los que utilizan el miedo para apoderarse de nuestras voluntades:
- miedo a perder el trabajo,
- miedo a un futuro incierto,
- miedo por nuestros hijos,
Y con miedo no se puede vivir, citando de nuevo el tema de Arcade Fire que suena ahora: "Tus sueños serán los únicos que te salven".
Los ciudadanos ya hemos soportado bastante, dejemos de lado esa zona cómoda, y defendamos lo nuestro, exijamos, más bien, lo nuestro.
Exijamos explicaciones a quienes nos gobiernan. Explicaciones de porqué mantienen toda una administración paralela a la vez que cierran urgencias, a la vez que recortan en educación, a la vez que nos aburren con esos discursos en defensa de los recortes de gasto.
¡Acaso no saben, que la sanidad y la educación, son los activos más rentables a medio plazo, la mejor inversión que podemos hacer si queremos tener un futuro!
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