Estado de malestar

Por Irene Serrano  

"Cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él" Johnathan Swift.

Anoche, mientras echaban en Telecinco un avance de Los días de gloria, serie en dos capítulos que podremos ver el 4 y 11 de julio, basada en hechos políticos y económicos reales acontecidos en nuestro país y que tiene como protagonista la figura de Mario Conde, me vino a la cabeza este pensamiento del siempre genial autor de Los viajes de Gulliver.

Esta frase explica bien cómo funcionan los gestores de lo público más mediocres y sus fieles servidores, disfrazados de burócratas al servicio del sistema, para contrarrestar algunas de las ideas que pudieran salvarnos a todos y que así, nunca llegarán a ver la luz.

El problema reside en que quienes nos gobiernan no defienden los intereses de la mayoría, porque sus intereses y los nuestros distan mucho de coincidir. Lo que resulta adecuado y conveniente para las personas, lo que resulta de interés general, parece no serlo tanto para el gobierno municipal, autonómico o para el presidente del país.

Además los instrumentos y herramientas que el poder tiene a su disposición son numerosos y muy sofisticados. Es difícil combatirlo. Medios de comunicación, altos cargos de libre designación en órganos estratégicos, una justicia en muchas ocasiones a su servicio, gran posibilidad de legislar, algunas veces de forma bastante arbitraria.

La semana pasada lo viví en primera persona, así que sé de lo que hablo. En mi ciudad, los gestores municipales han aprobado una nueva tasa por la recogida de basuras que ya estábamos pagando y que en 1983 se refundió junto a otros tributos fiscales dentro del recibo de contribución urbana. Esto como colofón, tras subir en 2012 el IBI un 13% (que es precisamente el impuesto que contenía ya esta tasa de basuras).

Varias plataformas ciudadanas y partidos minoritarios son los que lo han denunciado, yo misma escribí la semana pasada una nota de prensa en nombre de Sociedad Civil y Democracia (ver documento) y la envié a todos los medios de comunicación locales. Ninguno, y digo bien, ninguno lo ha publicado. En ella apuntaba pruebas que demuestran que esta tasa ya la estaba pagando el contribuyente. La prensa, ocultando esta información a la ciudadanía, omite su principal objetivo, que es el de dar a conocer los temas que son de interés y éste, en estos momentos tan difíciles, lo es.

Pues bien, voy a hacer mi reivindicación particular al respecto. No voy a pagar esta injusta e injustificada tasa, aún a riesgo de tener que pagar el recargo correspondiente, me da igual. Me niego a pagar esto y también a que la recaudación contribuya a sufragar entre todos, aquellas restituciones de la legalidad por cumplimiento de sentencias dictadas contra el ayuntamiento por el Tribunal Superior de Justicia.

Música: Selfish Jean | Travis | Álbum The Boy With No Name